El Hostal

HOSTAL-t.jpgFrente a la Estación vieja se encontraba el hostal de la tía Hilaria. Sólido edificio de dos plantas, tejado a dos aguas y un enorme portal que permitía el acceso de los carros al interior de un gran corral, alrededor del cual habían unos cubiertos para resguardo de los carros con toda su carga y de los animales , además de unas  parras alrrededor de las partes de sombra.

Como era habitual, el hostal disponía de una buena bodega, cocina espaciosa y chimenea, así como una gran estancia con tablas de madera de considerables dimensiones y sillas de enea. Desde aquí, y por una escalera, se accedía a un cuarto con habitaciones para el descanso de los carreteros.

Cuando decayó la función de hostal de carreteros, conservó durante muchos años la venta de licores y bebidas refrescantes, dada su privilegiada situación frente a la estación. Adosado a la pared de la calle se encontraba un abrevadero público de considerables dimensiones, hoy derribado.