La Cisterna
Cuentan lo viejos que ahora cuentan que en los alrededores de 1860 se declaró una epidemia de la que murieron muchísimas personas, parecía que el pueblo desaparecia. La gente no sabía de dónde provenía y cuál era la causa de aquel terrible desastre, hasta que detectaron que se trataba de hepatitis y su causa era el agua que provenía de la “Font de l’Ull”, seguramente contaminada por algún animal muerto que había caído en esa canaleta de tejas que iba al aire libre.
Como era obligatorio en aquel tiempo, para construir la cisterna en el pueblo, había que pedir permiso al gobernador de Valencia y así lo hizo el alcalde, pero como era la autoridad. ..
Un día sin embargo, el gobernador cayó enfermo y los vecinos de Xeraco aprovecharon esta circunstáncia para iniciar la construcción de la tant necesidada tubería y cisterna, a pesar que aún no se les había autorizado.
El 27 de diciembre de 1885 comenzó la construcción del aljibe en el lugar donde ya existía un pozo público, el cual fue aprovechado más tarde como desagüe. Las personas que la construyeron fueron tres albañiles muy buenos, tres hermanos de Almoines, el tío Jaime Nadal, Salvador y Andreu que más tarde también construyeron la Iglesia.